Ella: ¿Entonces qué haremos?
Él: El amor.
Ella: ¿Seguro?
Él: Si.
Ella: Bien, me voy desnudando.
Él: ¿Y para qué te quitas la ropa?
Ella: Pues para hacerlo.
Él: ¿Quién te dijo que tienes que hacer eso para hacer el amor?
Ella: Pues que yo sepa así se hace.
Él: No,eso no es amor.Es posesión.
Ella: ¿Y cómo se hace?
Él: Sólo déjate puesta la ropa y hablemos hasta cansarnos,
hasta intentar descifrarnos ,hasta saber todas tus memorias,
hasta saber nuestros hondos secretos,
hasta deleitarme con verte,hasta que estos ojos se cansen
y me obliguen a dormir.
Ella: ¿Y vas a forzarlos a estar abiertos?
Él: Si, para mirarte sólo a ti.